Expresiones

Prendida de las lámparas: Alumbran tres miradas de Rosario Castellanos

La obra teatral escrita por Elena Guiochins recrea etapas de la escritora para conmemorar el centenario de su natalicio el próximo 25 de mayo

Juan Carlos Talavera |
Ilustración de Rosario Castellanos y un poster de la obra Prendida de las lámparas.
Fotos: Archivo Histórico Excélsior y cortesía PiliPala / Fotoarte: Erick Retana.
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Era el 7 de agosto de 1974 cuando Rosario Castellano murió electrocutada. Ocurrió en su casa de Tel Aviv, como han referido múltiples fuentes, al conectar una lámpara a la corriente eléctrica, tras salir de la ducha con los pies mojados.

A partir de esa imagen, que alude al umbral entre la vida y la muerte de la escritora –que celebrará el centenario de su nacimiento el domingo 25 de mayo–, la dramaturga Elena Guiochins escribió la obra de teatro Prendida de las lámparas, que recupera la vida de la poeta y narradora mexicana, la cual será estrenada el sábado 24 de mayo, en el Teatro Juan Ruiz de Alarcón, en Ciudad Universitaria, bajo la dirección de Mariana García Franco.

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La obra parte de ese momento y, después, toca varias partes de su vida y de su escritura. Además, aparecen personajes que fueron importantes para Rosario, como Dolores Castro, Raúl Ortiz y Ortiz, y Ricardo Guerra, aunque siempre se mantiene a la poeta como figura central, a partir de tres miradas, es decir, son tres voces de Rosario que aparecen en escena: la niña, la estudiante y la embajadora”, detalla a Excélsior Mariana García.

Para este montaje, comenta la directora escénica, apostó por desarrollar un dispositivo escénico lumínico con cien lámparas que evocan la luz de Rosario. Además, incluye multimedia y un diseño sonoro que traducen parte de la vida de la autora de Balún Canán, así como la vastedad de su escritura y la profundidad de su pensamiento en un relato que no se cuenta de forma lineal, sino por capas.

Imagen intermedia

¿Cómo se representa la escritura de Castellanos en la escena? “Hay muchos elementos, como su máquina de escribir, las cartas y, sobre todo, muchos fragmentos de varios poemas de Rosario que aparecen en la obra, como Autorretrato, Pasaporte, Narciso 70 y El resplandor del ser, entre otros, porque no es posible entender la vida de Rosario sin su escritura, es decir, Rosario escribe casi biográficamente”.

¿Cómo se estructura la pieza? “Más que en línea, está en capas. Entonces, hay un diálogo constante entre las tres voces, como si estuvieran conviviendo al mismo tiempo. Por ejemplo, por ahí tenemos momentos donde hay alguna situación más infantil, digamos, y entonces es la que tiene más peso, pero están las tres Rosarios dialogando en escena.

Y justo lo que podemos ver aquí es ese movimiento que siempre tuvo Rosario, que fue una mujer que tuvo mucho sus viajes, de Comitán a la Ciudad de México y luego a Europa. Pero también hay mucho movimiento en su pensamiento y en su manera de escribir, así que pienso que estamos centrando nuestra lectura en ese movimiento y dialogando con ella desde nuestro tiempo”, expone.

Por otro lado, García Franco asegura que en la pieza se puede apreciar cómo Rosario Castellanos fue punta de lanza, junto con otras mujeres, para hablar sobre el feminismo. “Creo que la sociedad ha cambiado, ha evolucionado, pero aún hay muchísimas cosas que seguir pensando y reflexionando, y que volver a leer a Rosario es parte de la reflexión para seguir creciendo, y por eso es muy importante seguir dialogando con esta pensadora y escritora mexicana”, apunta.

Finalmente, destaca las obras de teatro que escribió Castellanos, en especial El eterno femenino. “Fue lo último que escribió Rosario, donde hizo una crítica puntual, igual que en su prosa o en sus cuentos –como en Álbum de familia–, en donde hace una crítica puntual sobre cómo la sociedad intenta determinar el destino de la mujer. Me parece que esa Rosario feminista también aparece en sus obras de teatro”.

BUSCAN ACERCAR OBRA DE ROSARIO CASTELLANOS A NUEVAS GENERACIONES

La obra, protagonizada por Luisa Huertas, Dulce Mariel y Ana Karen Peraza, es iluminada por un centenar de lámparas –como símbolo de su legado y de su propia muerte– en una puesta que busca acercar la figura y la obra de Castellanos a las nuevas generaciones.

Prendida de las lámparas se realizó en coproducción con la Secretaría de Cultura federal y se presentará en el Teatro Juan Ruiz de Alarcón del Centro Cultural Universitario, del 24 de mayo al 6 de julio y del 31 de julio al 23 de agosto, con funciones los jueves y viernes a las 20:00 horas, sábados a las 19:00 horas y domingos a las 18:00 horas.

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*mcam

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